El Panteón de Infantes en El Escorial fue mandado construir por expreso deseo de Isabel II en el año 1862 y terminado en 1888, consta de nueve cámaras. Se sitúan bajo el Patio de los Evangelistas, más concretamente en el sector que corresponde a la Sacristía y las Salas Capitulares. Destacan en ellas la gran cantidad de mármol blanco y de Carraca usado para su decoración.
En alguna de sus cámaras encontrarás sepulcros de la Casa de Borbón y de la Casa de Habsburgo, así como el de don Juan de Austria y un mausoleo de Infantes niños de ambas casas. Todas ella tienen la particularidad de estar presididas por un Altar. Sin lugar a duda su moderna decoración refleja que es una estancia hecha después de la construcción del Monasterio de El Escorial.
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¿Quién está enterrado en el Panteón de Infantes?
En el Panteón de los infantes se encuentran enterrados príncipes, infantes y reinas que no han sido madres de reyes. Tendrás ante tus ojos a más de 100 personas inhumadas y llama especialmente la atención la tumba de Juan de Austria, sin duda una de las muchas curiosidades del Monasterio de El Escorial.
Los dos panteones han sido elogiados por multitud de viajeros extranjeros que han ido a visitar el Monasterio de El Escorial. Afirman que su belleza está por encima de los de Londres y Paris.
Tras visitar las cortes europeas, al ver los panteones del Escorial no duda en
Alfonso XIII
afirmar que “debemos conservar esto con todo esmero, pues no he visto cosa
semejante en Europa”.
Un detalle que encontrarás en las tres cámaras más antiguas es que, entre las tumbas encontrarás las tres virtudes teologales: Fe, Esperanza y Caridad con texto inciso y acompañadas de un dibujo o emblema borgoñón.
